06 mayo 2015

¡Te amé, te amo como nunca!

Cuando partiste sentí que se desgarraba mi alma...
Solo mire al cielo rogando porqué a mí; instantes después no pude sino darte una bendición que te acompañaría por el resto del tiempo que estarías lejos de mí.

Siempre, desde el inicio te he amado, profundamente. Más que a mi carne y piel. He deseado tanto para ti que hubiera querido poder tener el poder de bajarte cada estrella para alumbrar tu camino, convertir cada deseo en una fiel realidad... pero, aquel día, hijo mío....
¡TE AMÉ COMO NUNCA!
Dicen que a los hijos se les ama más que a la vida y yo te amo mas aun, sólo que no me di cuenta cuanto te pertenezco hasta ese día...
así son las cosas de la vida, tienes que experimentar una "lejanía" para darte cuenta cuanto amor hay en cada corazón.

Mil recuerdos de tu presencia fugaz me invaden, hice de tus retratos en mi ordenador mi rincón especial para mirarte, para desde la distancia desear el mejor día, el mejor momento junto a ti hijit@, para que no me faltes tanto en esos días en que necesito un abrazo, una mano amiga.
Quizás soy de las madres mas egoístas del mundo, hoy lo sé. Nunca quise compartirte con nada ni nadie, sólo te quería ver sonreír, llevarte todas las mañanas a la escuela, ser complices de miles de travesuras y aventuras, dormir junt@s, ahuyentar a los mostruos que te atormentaban por las noches, tomarte de la mano cuando ando tenías miedo y en mi desmesurado afán tuve que verte partir.
Siempre te dije que te amaba. Y siempre te soñé junto a mi aún hoy lo sigo haciendo.
Hoy protejo tu memoria de a quienes les parece que esto ya paso y debo dejar atrás. Hoy debo prestar más atención a las intenciones de las personas que a las palabras que dicen acerca de la manera que nos toco vivir este amor pese a que en ocasiones lastiman mucho más.
HOY ESTOY COMPLETAMENTE SEGURA QUE TU PRESENCIA ME ACOMPAÑA DONDE QUIERA QUE VAYA Y HAGA.
Hoy no quiero sino, mi hij@ del alma, sabiéndote lejos de mí, rogar y rogar para que la vida generosamente me permita darle sentido a tu lejanía; mirar la luz al final de túnel. Te deseo profundamente reencontrarme contigo en ese maravilloso lugar lleno de amor, consuelo. El mismo donde sé que no sufres más....debo admitir que cierta envidia me invade al saber que es el mismo Dios quien te mima, abraza, cuida de ti y vela tu sueño.
Yo, desde la distancia, hij@ querido, te abrazo cada día en mis pensamiento, y como te dije hoy y siempre siempre te amaremos.
Gracias por estar junto a mí y secar mis lágrimas cuando la soledad me ataca, sé que al cerrar los ojos y pensar en ti te puedo escuchar decirme sigue adelante, estoy bien, no te rindas jamás. Cada mañana una oración me acompaña y bendice pero sobretodo me da las fuerzas para vivir con tu ausencia.
Dicen que los hijos son prestados, que son de la vida, de Dios... ¡Cuánta verdad! Sólo... sólo que yo no puedo aún desprenderme de ti...
Autor Forever, J. 
Modificaciones de FUNDABIR

No dudes de mi existencia

Sigo aquí...tan cerca que tus ojos no pueden verme como antes. 
No soy imaginación...soy mucho más de lo que alcanzan tus ojos y tus manos. 
Soy como las estrellas; que se ocultan bajo la luz del día. 
Sin que tú dudes de que siempre están ahí.
Lo hago para enseñarte.
Para que puedas aprender a verme sin mirarme y a sentirme sin tocarme. 
Un día me enseñaste tú, ¿recuerdas?
Yo para entonces no veía sólo sentía. 
Y jamás dude de que tú estuvieras ahí.
No dudes de mi existencia. 
Solo por que no puedes tocarme o abrazarme. 
Ahora soy como el viento...acaso dudas de su existencia, cuando te sopla, te roza y ruge; capaz de envolverte en un abrazo, sin que lo puedas coger o tocar. 
No lo dudes; no soy tu pasado. 
Soy tu presente: aquí y ahora. 
No temas en llorar y sonreír. 
De tus lágrimas haré un río; donde me bañaré contigo para que jamás te sientas solo. 
Con tu sonrisa me secaré la piel bañada dulcemente con cada gota de tristeza derramada por tu recuerdo y tu dolor. 
Es mi esencia: mágica y real. ¡No lo dudes!
Voy y vengo 
Soy como el sol siempre brillo 
No me escondo ni me fui
Solo vivo aquí y ahí
Solo voy al otro lado...siempre vuelvo, sin que nunca me vaya. 
Por que siempre estoy 
Y nunca me voy. 

El niño de la tierna sonrisa 

05 mayo 2015

Recomendaciones para transitar el duelo


Algunas de las recomendaciones que nos describe y sugiere el autor Jorge Bucay en su libro "El Camino de las Lágrimas" sobre como recorre el proceso de duelo con mayor calma, consciencia y claridad podrían eventualmente ayudarnos a salir adelante. A continuación hacemos una descripción rápida de las mismas: 

  1. PERMÍTASE ESTAR EN DUELO: Sentirse mal, necesitado y vulnerable; siente plenamente el dolor ese es el primer paso. Recuerda ningún camino termina si antes no se comienza a recorrerlo. 
  2. ABRE TU CORAZÓN AL DOLOR: No reprima ninguna emoción ¡no te hagas el fuerte, no guardes todo para adelante!. Tampoco escondas tu dolor...comparte lo que te esta pasando pero sé sabio con quién lo haces no todos están abiertos para escucharnos en estos momentos muchos no nos quieren ver sufrir y  por ende evitan cualquier tipo de diálogo. Hay un dicho popular que expresa que cuando las penas se comparten el peso se divide. 
  3. TOMA TU TIEMPO: Solemos escuchar muy a menudo que el tiempo lo cura todo no es cierto en realidad lo importante y lo que ayuda es lo que haces con el tiempo. Tampoco te hagas expectativas habrán recaídas prepárate en esas fechas especiales. Pregúntate ¿en qué estas utilizando este día? para aceptar que estás en duelo, para reconocer que lo han muerto y no volverán, para sentir tus emociones intensamente y expresar el dolor, para aprender a vivir sin ese hijo/a o para centrarme en mí. 
  4. SÉ AMABLE CONTIGO: El peor enemigo en el duelo es no quererse así que recuerda los tiempos son tuyos no importa lo que digan los demás. Sé paciente y no te apresures
  5. NO TEMAS VOLVERTE LOCO: Necesitas sentir el dolor y todas las emociones que te acompañan día con día. Haz caso omiso a el "tienes que ser fuerte". 
  6. NO TOMES DECISIONES IMPORTANTES: Existe un cierto grado de confusión principalmente al inicio del duelo común durante este viaje así que deja para después las decisiones importantes ya que podrías lamentarte posteriormente. 
  7. NO DESCUIDES TU SALUD: Nos ocupamos casi de inmediato de los actos conmemorativos para nuestros hijos que no prestamos atención al propio cuerpo que también sufre y acarrea consecuencias. Una sugerencia es seguir un cronograma de actividades y lo sigas, quizás te resulte útil.   
  8. SÉ AGRADECIDO: Valora las cosas buenas y pequeñas en medio de está situación pueden ser algunos vínculos, gestos o aspectos generales de la vida como los recuerdos, etc. 
  9. PIDE AYUDA SI LO NECESITAS: Dale la oportunidad a quienes lo desean de permanecer cerca; ellos desean ayudarte pese a que no saben cómo así que de paso pide lo que necesites. 
  10. SÉ PACIENTE CON LOS DEMÁS: Ignora aquellos intentos de decirte cómo tienes que sentir y por cuánto tiempo; no todos comprenden lo que estás viviendo. Amorosamente intentan que olvides tu dolor...ten paciencia pero no te ocupes de complacerlos, apártate gentilmente y busca a quienes te permitan "estar mal" o desahogarte sin miedo. Por un tiempo deberás prestar más atención a las intenciones que a lo que dicen a veces quien pensábamos sería nuestro mejor compañero de viaje no puede compartir tu momento. 
  11. DESCANSA, DISFRUTA Y DIVIÉRTETE: Date permiso de estar bien, de reír, salir. Recuerda que tu ser querido desearía lo mejor para ti así que voluntariamente construye buenos momentos.
  12. CONFÍA EN TUS RECURSOS PARA SALIR ADELANTE: Recuerda como resolviste situaciones difíciles anteriormente, necesitas dar algunos pasos para recuperarte sin atajos. Vas a vivir momentos duros y emociones displacenteras intensas en un momento en el que estás muy vulnerable: ¡estás en condiciones de afrontar lo que sigue, porque si estás en el camino lo peor ya ha pasado. Confía en ti!
  13. ACEPTA LO IRREVERSIBLE: Acepta la realidad de la pérdida no hay retorno sólo sigue hacia adelante. Nunca es el momento indicado para que alguien parta...así que debemos decidir entre seguir esperando y no recorrer el camino del duelo o decidir cuando los hechos lo permitan una tenue esperanza. 
  14. ELABORAR EL DUELO NO ES OLVIDAR: Permítete buscar para tu ser querido el lugar que mereces entre los tesoros de tu corazón. El poder pensar ni no sentir oleadas de dolor; recuerda con ternura. Permítete dar un sentido a todo lo vivido.
  15. APRENDE A VIVIR DE NUEVO: Vivir sin ellos y de otra manera....descubrir habilidades, talentos, tomar en manos nuevos proyectos, etc. 
  16. CÉNTRATE EN LA VIDA: La vida te espera llena de oportunidades; no hay nada malo en querer disfrutar, ser feliz, establecer nuevas relaciones. "El corazón herido cicatriza abriéndose a los demás"
  17. DEFINE TU POSTURA FRENTE A LA MUERTE: ¿Qué significa morir? ¿Qué sucede después? 
  18. VUELVE A TU FE: Algunas cosas en la vida no pueden ser manejadas por si solos; muchas personas encuentran llevar esta situación a Dios una forma tranquilizadora para aligerar la carga que hace que el corazón pese. Es un momento de pedir a Dios nos ayude aceptar los cambios y nos ayude a ver las opciones. 
  19. HÁBLALE A OTROS: De tu experiencia cuando tengas una buena parte del camino recorrido no minimices la pérdida que has sufrido ni menosprecies tu viaje. Contar lo que aprendiste puede marcar corazones haciendo más fácil su propio camino.  

¿Cómo debo vivir de hoy en adelante?

Al inicio de este viaje vivimos preocupados en el cómo ¿cómo nos sentimos? ¿cómo duele esto que nos paso? ¿cómo sufro cada día por su ausencia? . Es una reacción normal durante este proceso, no obstante, nos limita a mirar hacia atrás (lo que ya paso; el pasado). 

Mirar esa situación que no podemos cambiar ni corregir en el tiempo nos hace sentir inevitablemente mal provoca el llanto, impotencia y dolor por el vacío que ha quedado. Por esa razón, invitamos a todos los padres que se nos acercan a que no se pregunten más ¿cómo..? por el contrario que se cuestión el ¿para qué? de la experiencia vivida. 

Volví a sentir unas inmensas ganas de vivir cuando descubrí
que el sentido d e mi vida era el que yo quisiera darle 
El ¿para qué? nos permite cambiar la mirada hacia adelante...¿para qué me levanto? ¿para qué debo ir a trabajar? ¿para qué debo continuar? ¿para qué debo sufrir con dignidad? ahí se encierran las cosas que puedo hacer y mejorar por mí, por los que quedan y por quién o quiénes se marcharon demasiado pronto. 

Debo permitirme darle un sentido a esta vivencia a la vez que la integro a mi historia de vida y de mis familiares. Sin lugar a dudas usted me preguntará ¿cómo lo hago? hallando el ¿para qué? es decir que la cuestión no es más ¿cómo me siento por esto que no puedo cambiar? y ojo con esto no le estoy diciendo que no exprese toda la gama de emociones en su viaje durante el tiempo que este en duelo todo lo contrario sin embargo pregúntese ¿cómo debo vivir de hoy en adelante? Recuerde que sería muy fácil cerrar puertas y ventanas, tirarnos a la cama y llorar todo el día el reto se encuentra en enfrentar la vida diaria con la frente en alto.

"QUIEN TIENE UN PORQUÉ PARA VIVIR SIEMPRE ENCUENTRA EL CÓMO" Nietzsche