Mi esposo y yo estábamos buscando bebé hasta que la prueba salió positiva y cuando me hice el ultrasonido para saber cuanto tiempo tenia de gestación SORPRESA … MELLIZOS!!! Estábamos muy emocionados y a la vez asustados como cualquier padre primerizo. El primer trimestre todo bien según el ginecólogo de la clínica, queríamos saber el sexo de los mellizos y pagamos por ello a una radióloga a la cual había que sacarle las palabras y al parecer todo bien con ellos pero el sexo aún no se podía ver la postura de los bebés. Un par de semanas más tarde empecé a sentir mucho dolor en la espalda y en las piernas lo cual ignore ya que pensé que como eran mellizos y al parecer estaban grandes estaban abriendo campo para crecer y como primeriza no supe distinguir.
Pase con dolores toda la noche casi sin poder dormir hasta que alrededor de las 5:30 am me sentí mojada entre las piernas, a como pude me levante con rapidez y encendí la luz, me baje mi ropa interior y la sangre empezó a correr por mis piernas mire mi cama y estaba manchada también. Mi esposo estaba dormido y lo desperté con un grito: -¡Crissss vea!, esto no es normal (estaba llorando). Mi esposo se levantó como loco y llamó a mi madre (ella vive a la par ) para que de esta manera nos llevara al hospital, mientras caminaba al baño dejaba sangre en el camino, mi madre llegó y me dijo: -¡ Hayy Yency!- Y salió corriendo a encender el carro, mi esposo y yo nos cambiamos y nos fuimos al hospital al cual llegamos como a las 6:00 am.
Nos atendieron muy rápido en emergencias, la doctora en turno me reviso y me dijo: -¡Mamá no la voy a tocar tiene el cuello de reloj de arena!- Yo en mi vida jamás había escuchado sobre eso; nos explico es cuando el cuello uterino se dilata y una parte de la bolsa donde esta el bebe esta afuera. Me dijo que me tenía que internar y me dijo que no me levantara porque si no él bebé se podría salir, ella fue muy buena conmigo ya que se quedo conmigo hasta que me dieran una cama y quedara formalmente internada, las contracciones cada vez eran más fuertes y seguidas, podía sentir cuando mi nena iba bajando, me ponían el doopler y sus corazones estaban latiendo fuertemente. Me dieron una cama en ” alto riesgo” mis contracciones cada vez eran más fuertes y el doctor nos explicó que era casi imposible que ellos sobrevivieran ya que eran muy pequeños y sus pulmones no estaban del todo desarrollados pero que también había un rayito de esperanza y que solo un milagro lograría salvarlos.

Era perfecta no podía parar de verla de pies a cabeza, contarle sus deditos y admirar su belleza a las 8:24 un 12 de Julio del 2016 nació mi hija, mi familia me llamaba por teléfono llorando y lo curioso es que yo solo sentía amor y felicidad, podía ver el desinterés de los doctores al dejarme dar a luz sola y que mi esposo la recibiera, un enfermero llego vio a mi hija y me metió su mano para tactar a mi otro hijo yo no podía soportar ese dolor estuvo en eso casi por un minuto mientras que mi hija dejaba de respirar, se movía mucho, bajo su mano lentamente hasta que su color cambio y se llevaron de nuestro lado, nos pasaron otra vez a “alto riesgo” y yo solo quería descansar, no me querían dar comida por me tenían que hacer cesárea y yo ahí desde las 6:00 am, mis piernas temblaban del dolor y mi espalda no aguantaba más ya que tooodoo tenia que hacer acostada en un bidé, alrededor de las 12:25 am quise darme la vuelta para descansar mi espalda y sentí como el deseo de vomitar mi cuerpo brinco solo y me dio como un hipo y sentí algo salir de mi… yo oraba que fuera la placenta que dejo mi hija pero al contrario algo se movía con fuerza entre mis piernas era mi hijo Jahcell el cual nació con su dedito en la boca a las 12:32 am y no paraba de patearme, mi esposo y mi suegra estaban conmigo y ellos lo vieron nacer y el doctor dijo: - que no podían haber nada ya que era muy tarde ( ni lo intentaron )- me llevaron hacer el legrado y yo lo tenía abrazado entre mis piernas, una enfermera me dijo que el tenia frió así que le cubriera la cabecita con mi mano lo hice me llevaron a la sala para el legrado y mi hijo todavía estaba vivo pero así no podía sobrevivir, me pasaron de cama y me durmieron y al despertar estaba sola y con mis manos vacías.

-bueno. esto sería verdad... no tengo que llevarme nada: ¿algún papel o algo?,¿Ya todo está listo? - una de ellas me dijo:-¡Usted no se lleva nada verdad!,¡Eran muy pequeños verdad!- Mi mundo se derrumbó no pude hablar solo sentir como metafóricamente me caía en un hoyo negro y dije:¡si eran muy pequeños! y me dijo: ¡bueno eso es todo ya se puede ir!. Al salir del hospital me di cuenta que salía con los brazos vacíos y los pechos llenos, me ofrecieron llevármelos para enterrarlos pero no pude hacerlo no tuve las fuerzas para hacerlo.

Mamá de Yunias y Jahcell
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